La condición de Profesor Emérito es un reconocimiento de méritos de especial relevancia, adquiridos en el ejercicio de las actividades de docencia, investigación, extensión y gestión, que el Consejo Universitario de la Universidad Nacional concede a sus profesores jubilados que hayan acumulado un currículum vitae de excepcional calidad y de reconocido prestigio nacional e internacional.
Conozca más características de esta distinción, así como la lista de docentes universitarios que la han recibido.
Sesión Solemne de entrega de la Distinción Académica Profesor Emérito al señor Quince Duncan en el año 2018
Con la Distinción Académica Profesor Emérito se hace entrega de un pin con la silueta del insigne educador costarricense Omar Dengo, nombre que lleva el campus de Heredia de la Universidad Nacional. Se entrega también un certificado con la información del reconocimiento entregado, el nombre de la persona merecedora y el acuerdo tomado por el Consejo Universitario, así como la fecha correspondiente. Adicionalmente se entrega una placa.
Pin correspondiente a la Distinción Académica Profesor Emérito
Placa correspondientes a la Distinción Académica Profesor Emérito
Las académicas y los académicos designados con esta distinción son:
Francisco Álvarez González, (q.D.g.) académico del Departamento de Filosofía y del Centro de Estudios Generales, 1993
Por su trayectoria y copiosa producción intelectual, que se refiere a la proyección filosófica como esencial, así como la vertebrada manera de darle forma a cada uno de los títulos, escritos o publicaciones. Su pensamiento contribuye a establecer un espacio de disidencia, de dignidad de pensamiento, de ágora donde confluye la herencia clásica y todas las formas de reflexión derivadas de ella, que son la base del auténtico pensamiento reflexivo.
Faustino Chamorro González, académico de la Escuela de Literatura y Ciencias del Lenguaje, 1995
Se ofrece esta distinción por su destacada labor docente y su aporte a la cultura nacional, además, por haber sido uno de los profesores jubilados que más ha aportado a la cultura costarricense y uno de los primeros en recibir el Premio Roberto Brenes Mesén, máximo galardón que se ofrece a los académicos destacados por parte de la Comisión de Carrera Académica de la Universidad Nacional.
Jorge Charpentier Garcia (q.D.g.), académico de la Escuela de Literatura y Ciencias del Lenguaje, 1995
Se ofrece esta distinción por su destacada labor docente y su aporte a la cultura nacional. Además, por su aporte al desarrollo y consolidación -en calidad de fundador y gestor- de la Escuela de Literatura y Ciencias del Lenguaje y de la Universidad Nacional, y por haber sido merecedor del Premio Nacional de Cultura y uno de los primeros en recibir el Premio Roberto Brenes Mesén, máximo galardón que se ofrece a los académicos destacados por parte de la Comisión de Carrera Académica de la Universidad Nacional.
Silvia Rodríguez Cervantes, 2003
Propuesta por el Consejo Académico de la Escuela de Ciencias Ambientales por ser investigadora pionera en la búsqueda de una mejor relación entre la sociedad y el ambiente.
El trabajo con diferentes sectores permitió la producción de un sinnúmero de publicaciones utilizadas por estudiantes de las carreras de Ingeniería Forestal y Educación Ambiental. Fue la gestora de la Ley de Biodiversidad aprobada en la Asamblea Legislativa el 23 de abril de 1998.
Héctor Pérez Brignoli (argentino nacionalizado costarricense), 2003
Fue propuesto por el Consejo Académico de la Escuela de Historia por ser una connotada autoridad en las ramas de la Historia y las Ciencias Sociales costarricenses, centroamericanas y latinoamericanas. Ha sido un elemento fundamental en la transformación historiográfica nacional y regional, además de maestro formador de muchas generaciones. Varios de sus libros se han editado en el extranjero y traducidos a otros idiomas.
Flora Ovares Ramírez, 2004
Propuesta por el Consejo Académico de la Escuela de Literatura y Ciencias del Lenguaje por una labor académica distinguida por valores admirables, un alto sentido de responsabilidad, amor a la literatura, pero fundamentalmente por su calidad humana y su deseo de compartir sus conocimientos con un proyecto de formación de jóvenes educadores y con sus colegas especialistas en literatura.
Sobresale su larga y fructífera trayectoria en la investigación universitaria, la cual se ha materializado en múltiples publicaciones. Su obra ensayística ha sido galardonada en diversas oportunidades con premios nacionales.
Deyanira Sequeira Ortiz, 2004
Fue propuesta por el Consejo Académico de la Escuela de Bibliotecología, Documentación e Información por su aporte a la creación del Sistema de Información Documental de la Universidad Nacional, el logro de la construcción del edificio de la Biblioteca Joaquín García Monge y como fundadora de la carrera de Bibliotecología.
Adelaida Chaverri Polini (in memoriam), 2004
Es propuesta por el Consejo Académico de la Escuela de Ciencias Ambientales por su trabajo de investigación en montañas altas del país. Estas investigaciones aportaron conocimiento sobre los ecosistemas de altura, especialmente en la Cordillera de Talamanca.
Produjo más de cincuenta publicaciones en esta especialidad que son utilizadas en la academia y en la promoción del desarrollo del ecoturismo a través del diseño y elaboración de senderos naturales en los robledales de altura.
Cora Ferro Calabrese (in memoriam), 2004
Fue propuesta por el Consejo Académico del Instituto de Estudios de la Mujer (IEM) por sus aportes invaluables a la Universidad Nacional y a la sociedad costarricense, al promover la incorporación de los estudios feministas en la academia.
Fue cofundadora, directora y subdirectora del IEM, Decana de la Facultad de Filosofía y Letras, académica de la Escuela Ecuménica de Ciencias de la Religión, y presidenta de la Comisión de Carrera Académica.
Alfio Piva Mesén, 2009
Al Doctor Piva Mesén se le reconoce el haber sido miembro de la Comisión Ad Hoc que se conformó al fundarse la Universidad Nacional y además por haberse desempeñado como rector de esta casa de estudios superiores. También se le reconoce la creación de la Escuela de Medicina Veterinaria.
Juan Durán Luzio, Junio de 2015
Por los valiosos servicios prestados al desarrollo de la Escuela de Literatura y Ciencias del Lenguaje de la Facultad de Filosofía y Letras y de la institución en general. Así como por su invaluable labor como investigador de la literatura latinoamericana.
Luis Jorge Poveda Álvarez, 2017
Por ser una autoridad de reconocido prestigio nacional e internacional en el campo de la investigación, así como su invaluable labor, por más de 40 años, como académico en las áreas de biología general, botánica, dendrología, fisiología y anatomía vegetal.
Edgar Céspedes Ruiz, 2017
Por ser una autoridad de reconocido prestigio nacional e internacional en la defensa de los derechos humanos, reconociendo su aporte hacia la búsqueda de rutas que permitieron avanzar en la mediación pedagógica de la educación rural.
Además por haber incorporado el arte en los ámbitos educativos formales y no formales, como una forma de expresión que favorece la construcción de mejores espacios relacionales para forjar una ciudadanía comprometida con el bien común.
Quince Duncan Moodie, 2018
Por ser una autoridad de reconocido prestigio nacional e internacional en el campo de la literatura y una de las voces más representativas de la literatura afro-costarricense, además por su compromiso y lucha a favor de los derechos humanos.
Clemencia Conejo Chacón, 2018
Por ser una autoridad de reconocido prestigio nacional e internacional en el campo de la Educación Física, el Deporte y la Recreación y por su destacada labor en la academia y en la gestión universitaria. Además, por promover estilos de vida saludables en la comunidad institucional, nacional y regional.
Edgardo Moreno Robles, 2019
Se le otorgó esta distinción honorífica por sus más de 43 años de participación en la academia universitaria y por ser una autoridad de reconocido prestigio nacional e internacional por los aportes a la investigación de la Brucella.
Se le reconoce, además, su compromiso al servicio de la salud humana y animal, así como el haber posicionado a la Universidad Nacional en el ámbito internacional con sus estudios y visión, al consolidar equipos interdisciplinarios de personas investigadoras.
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